La soldadura fuerte (“brazing”) es el proceso de unión de dos piezas mediante calor y un material de aportación que se funde a una temperatura por encima de los 427º C (800 ºF) y por debajo del punto de fusión de las piezas a ser soldadas. El material de aportación utilizado en soldadura fuerte varía en función del material de las piezas a unir. Las aleaciones que más se utilizan son de cobre fosforoso, plata, níquel y cobalto, aluminio-silíceo, cobre, cobre-zinc y magnesio. El objetivo de este proceso de soldadura entre piezas de iguales o distintos materiales, es crear una unión permanente de alta resistencia, simplificar la operación mecánica y adoptar técnicas de producción sencilla, siempre compatible con las exigencias de la producción en cadena entre otros. Existen distintos métodos para realizar la soldadura fuerte por ejemplo el soplete, por resistencia, horno, infrarrojos, láser o por inducción entre otros. La soldadura fuerte realizada por inducción presenta una serie de ventajas frente a estos otros métodos.
Soldadura fuerte del anillo de cortocircuito en el rotor
Soldadura fuerte de insertos de carburo.
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